lunes

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Quedarse era peor que irse. Nunca fue la voz que quería escuchar. (¿Qué hago?)

Dicen que uno está, a veces, más perdido, cuando no se pierde en nadie.

Pero… No, no era la voz que quería escuchar.

3 comentarios:

Lola dijo...

No siempre la voz que suena es la queremos escuchar. Pero suena. Y por momentos no podemos acallar su sonido.

Rox. dijo...

Comparto lo que dijo Lola.
Un beso.

eliú dijo...

quedarse era peor porque era más valiente enfrentar esa voz...