domingo

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Y hay días en los que Córdoba me parece tan linda y llena de vida. Ahí en ese momento en el que me siento en algún banco, saco los libros y entre palabra y palabra miro a la gente que pasa, que se queda, que me mira. A veces creo que intuyen mi espera. Ninguno saben quien soy y a mi ni siquiera me preocupa saber quienes son ellos.
Ahí donde lo único que ocupa mi vida es ese momento, donde me lleno de plenitud y me hago eterna. Ahí, donde me pregunto que será de alguna vida que deje atrás, donde estará, y pienso en las vidas que me quedan por encontrar, donde estarán, donde estarás.
Ahí estoy, yo siendo yo, sin necesidad de buscarme. Simplemente estando.
Y me descubro, y me veo, y me siento, con mi soledad tan sola y tan mía que creo que haría lo que fuera por abrazarla y pedirle que nunca se vaya.

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